El Amor como Perfume

"No hay que enamorarse de los demás sino de uno mismo. Recién ahí luego lo podemos compartir."

Si te perfumas con la última fragancia de Dolce & Gabbana, o tu perfume favorito, al pasar cerca de las otras personas, éstas sentirán el aroma. De la misma forma, si tienes amor propio, si te amas, si te cuidas a ti mismo, los demás sentirán inevitablemente el aroma de tu amor propio, perfumarás el lugar con tus vibraciones elevadas porque por dentro llevas una relación amorosa contigo. Eso se traduce en confianza, en apertura y alegría. Pero nos maleducaron para amar a los demás, a Dios, a la familia, a la patria, todos ellos elementos secundarios e imposibles cuando no te amas, porque la pregunta es inevitable: ¿si no tengo yo dinero para mí, cómo lo voy a dar? Si no tienes algo, no lo puedes compartir.

Comencemos a ver el amor como perfume. Tú mismo generas la loción personal que hace que la vida sea algo bello o maloliente. Y así, de perfume en perfume, esto se convierte en un campo lleno de fragancias. Recuerda, una fragancia te lleva a soñar, a sentir y a rememorar una visión de la plenitud. Tú serás recordado por tu fragancia personal, por tu forma de ser, por tu visión y por ese ser que vive dentro de tu cuerpo.

Guillermo Ferrara